INGREDIENTES:
400 gramos de espinacas frescas
10 cl de nata
50 gramos de queso roquefort
4 dientes de ajo
Aceite de oliva
Sal
PREPARACIÓN:
Poner en una sartén un poco de aceite de oliva y freír los ajos cortados en rodajitas, sin dejar que se quemen.
Agregar las espinacas y sazonar con sal, removiendo para que se impregnen del sabor del ajo.
Mientras, en un cazo se vierte la nata con el roquefort partido en trozos y se calienta hasta que se funda el queso y se consiga una salsa de consistencia suave.
Incorporar esta salsa de roquefort a las espinacas y mezclar en la sartén todos los ingredientes un rato más. Retirar del fuego.
Sugerencia:
Como en las demás recetas con nata, ésta puede sustituírse perfectamente por leche de soja si prefieres una salsa más ligera.