Este plato se cocina sin aceite ni otro tipo de grasa, lo que lo hace muy adecuado para aquellas dietas que tienen restringidas el uso de las mismas.
INGREDIENTES:
400 gramos de garbanzos cocidos ( o un bote de 400 gramos)
1 calabacín
1 tallo grande de apio
1 zanahoria grande o 2 pequeñas
2 patatas
1 pimiento verde
1/2 kilogramo de tomates rojos
1 cucharadita de comino molido
1 cucharadita de pimentón picante
2 cucharaditas de menta o hierbabuena
Pimienta negra molida
Sal
PREPARACIÓN:
Usaremos una cazuela grande con un poquito de agua, la suficiente para que no se pegue la verdura, no más.
Primero, tener preparadas y cortadas todas las verduras, ya que se irán incorporando casi todas a la vez.
Cortar en rodajas las zanahorias, los calabacines, el pimiento y el apio.
Las patatas en dados y los tomates pelarlos y triturarlos.
Se lleva a ebullición el agua de la cazuela y se añade el pimiento, el calabacín, las zanahorias y el apio. Se dejan cocer unos minutos, removiendo sin parar y cuando se empiecen a ablandar un poco se les agregan las patatas y los tomates.
Especiar con el comino, la menta y el pimentón, añadiéndoles un poco de sal.
Pr último, se incorporarn los garbanzos bien escurridos y se mezcla con el resto de las verduras.
Cocer a fuego lento hasta que las patatas y los garbanzos estén listos. Servir inmediatamente.
Sugerencia:
Los tomates se pueden batir en la batidora y hacer con ellos una salsa antes de añadirlos a las verduras. De esta manera queda más suave el conjunto y mejora la presentación .