LA AVENA


La avena es un cereal que posee numerosos elementos nutritivos, lo que la hace un excelente reconstituyente del organismo humano.

Sin embargo, antiguamente la avena no tuvo la importancia de cereales como el trigo o la cebada.

En búsquedas arqueológicas se encontraron pruebas del uso de la avena en Europa Central en la Edad de Bronce, así como granos de este cereal en excavaciones egipcias.

Las especies más cultivadas son la Avena sativa y la Avena byzantina.

Propiedades:

Es rica en proteínas de alto valor biológico, grasas, vitaminas y minerales. Es el cereal con mayor proporción de grasa vegetal, un 65% de grasas no saturadas y un 35% de ácido linoleico.

Contiene, además, hidratos de carbono , sodio, potasio, calcio, cobre, cinc, magnesio, fósforo e hierro.

También es rica en vitaminas del grupo B, siendo, por otra parte una buena fuente de yodo, lo que la hace indicada para conseguir un buen funcionamiento de la glándula tiroides.

Beneficios:

El consumo de la avena es muy recomendable en zonas frías, durante el invierno, para aquellas personas que necesitan un mayor aporte de energía, como los estudiantes, personas abatidas o con constante sensación de sueño o estrés.

Asimismo, es bastante recomendable durante el embarazo, el crecimiento y la vejez.

La avena tiene una acción benéfica sobre los órganos urinarios, lo que la hace poseer propiedades adelgazantes.

Es también beneficiosa en casos de estreñimiento y para prevenir el insomnio.

Usos:

En la cocina se usa normalmente en copos o en forma de harina integral.

En copos se pueden tomar simplemente con leche de soja, ser añadidos a las sopas o preparar con ellos un muesli.

Países productores de avena son Alemania, Australia, Canadá, EE.UU, Finlandia, Polonia, Rusia y Suecia.