A la nuez de Brasil, cuyo nombre científico es Bertholletia excelsa, también se la conoce con otros muchos nombres como: castañas de Pará, Coquitos de Brasil, castañas del Beni, Yuvia o Sapucaia.
Proviene de un árbol de América del Sur que se da en la cuenca del Amazonas. Podemos encontrarlo en Bolivia, Brasil, Guayana, Colombia, Perú y Venezuela y es uno de los más altos de los bosques de la Amazonia.
Estas nueces se producen exclusivamente de árboles silvestres.
La cáscara de la nuez de Brasil contiene en su interior unas 20 nueces que, a su vez, también están provistas de una cáscara. Cuando se madura la nuez se cae sola al suelo y se recolecta. Entonces se descascarilla y se dejan secar los coquitos al aire.
Composición
Su contenido en proteínas es del 15 % y de hidratos de carbono del 6%.
Es una fuente importante de Selenio, Magnesio y Tiamina .
Tiene un alto contenido en Fósforo, por lo que están especialmente indicadas para aquellos momentos en los que va a realizarse un intenso trabajo intelectual.
La proporción de grasas es del 65%, aunque la mayor parte de sus aceites son insaturados.
Asimismo, forma parte de su composición el Hierro, el Calcio y las vitaminas C, B1, B2 y la provitamina A.
Propiedades
Se puede utilizar como diurético calentadas en leche.
Util en las afecciones de oído, uso tópico.
Usos
Están deliciosas consumidas en crudo, puesto que son bastante sabrosas. Sin embargo, no es extraña su aplicación en la repostería para confeccionar todo tipo de pasteles y helados.
No obstante, la nuez de Brasil puede tener otros usos que no están relacionados con la alimentación. Por ejemplo, su aceite se utiliza en la fabricación de pintura y como lubricante de relojes.
También para la elaboración de cosméticos y de jabones.