Almidón/ácidos (frutas ácidas, vinagre). Incorrecta.
Los almidones son los: cereales, patatas, legumbres, habas, judías, boniatos, plátanos castañas, calabazas, cacahuetes, tapioca, raíces (zanahorias, nabos, remolachas).
La clasificación de las frutas ácidas puede verse en este artículo.
Esta es una mala combinación porque, para digerir los almidones necesitamos una sustancia existente en la saliva llamada ptialina y dicha sustancia se destruye en contacto con cualquier ácido. Con lo que la digestión de los almidones quedaría paralizada.
Almidón/proteína. Incorrecta.
Proteínas son los: frutos secos (nueces, avellanas, almendras, etc), cereales, judías, legumbres, cacahuetes, soja, aceitunas, productos lácteos, huevos, carne y pescado.
En el artículo introductorio sobre la teoría de la combinación de los alimentos quedó explicada la razón por la que ésta es una combinación bastante incorrecta.
Básicamente, el estómago segrega jugos diferentes según el tipo de alimento que ha de digerir. Así, para un almidón segregaría un jugo alcalino, mientras que para una proteína sería un medio ácido. El problema surge cuando se combinan estas dos secreciones al mismo tiempo en el estómago, ambas se neutralizan quedando así sin digerir tanto la proteína como el almidón.
Nótese que las legumbres y cereales son proteína y almidón al mismo tiempo, como puede verse en los ejemplos de más arriba. Esta es una combinación natural que, aunque no tan mala como mezclar proteína y almidón con dos alimentos diferentes, explicaría el porqué son tan indigestas a veces. Motivo de más para tener especial cuidado con los alimentos que elegimos para tomar junto a ellos.
Almidón/azúcares. Incorrecta.
Azúcares son: la miel, azúcar moreno, melaza, azúcar blanco, miel de caña, etc.
Los azúcares se digieren en el intestino delgado, siendo muy rápida su absorción. Los almidones, sin embargo, se digieren en la boca por la acción de la saliva.
Cuando se consume azúcar se segrega saliva sin ptialina (sustancia necesaria para digerir los almidones), con lo que queda obstaculizada la digestión de estos dos alimentos.
Además, los azúcares permanecen en el estómago hasta que los demás alimentos con los que se ha tomado se digieren y como consecuencia se produce fermentación. Esto es algo muy habitual en el azúcar, ya que tiende a fermentar rápidamente en un medio caliente y húmedo como es el estómago.
Conclusión, esta combinación lo que nos depara es acidez de estómago e indigestión.